Wednesday 30 September 2009

Catolicismo y fascismo

Hace algunos días, después de leer (sufrir) un 'artículo' en la página de un bloguero acerca de un comentario del escritor Ramón Rocha Monroy (RRM), me propuse crear el siguiente post. El 'analista' dice que Rocha Monroy está totalmente equivocado y trata --a todo chancho-- de quitarle lucidez a dicho artículo. Para demostrar, primero, que sin las palabras de RRM su libelo no existiría, me propuse demostrar que para un manipulador malicioso, cualquier cosa se puede asemejar al fascismo: es un juego de palabras. Lo que el 'analista' no pudo entender es la profundidad del análisis de RRM. Es, en otras palabras, una carencia de comprensión que parece insalvable y sobre la cual al querido Ramón no le puede echar culpa alguna. Como sea, aquí abajo (en color gris) están las palabras del 'analista' ligeramente modificadas por Rebelde para recrear otro contexto, el del catolicismo. Y no, no estoy en contra del catolicismo, sólo utilizo ese ejemplo para demostrar lo peligroso de la manipulación y la ignorancia intencional que a muchos parece atacar en el país. Disfruten y rían tanto como yo lo hice cuando me enteré de dicho libelo.


Nota: Todos los errores ortográficos que encuentren le pertenecen al susodicho autor. Rebelde dejó los mismos para demostrar cuál atrevida suele ser a veces la ignorancia.



Catolicismo y fascismo

Acabo de leer un libelo del pseudoanalista Juan De sarco que refuta el calificativo de fascista que hacen algunos sectores hacia al catolicismo... he aquí algunas observaciones al libelo.

Ramón Rocha Monroy dice: "El fascismo es una concepción organicista del Estado y de la Sociedad, que no reconoce ninguna disidencia ni régimen electoral ni derechos civiles ni sindicatos ni menos libertad de pensamiento y de expresión".

La religión católica es una concepción organicista de la Fé, que no reconoce la disidencia y solo reconoce la existencia de un dios todopoderoso, los obispos y creencias civiles y las agrupaciones religiosas fieles y serviles a sus fines.

"El fascismo se basa en el pueblo organizado en fascios di combatimento, y por tanto no reconoce al individuo y a su libre albedrío. Bajo el fascismo no hay individuos. Nadie puede dejar de pertenecer a un fascio íntimamente ligado al partido de gobierno, que forma parte del Estado totalitario."

El catolicismo se estableció en base a las acciones violentas de la "cristiandad" que no son otra cosa que sus bases muy bien organizadas en agrupaciones inquisitoriales, obispos rojos, satucos, etc... a quienes dirige, y que tampoco reconocen al individuo y su libre albedrío (¿el derecho a obedecer la infalibilidad del papa les parece albedrío?).

"El fascismo somete a los sindicatos y convierte a las fábricas en cuarteles de producción. El fascismo tiene vocación militar, es por esencia antipacifista. El fascismo cree en las virtudes de la sangre y la raza asentadas en una nación que excluye y amenaza a las demás."

El catolicismo ha comprado casi todos los gobiernos y convierte sus empresas estratégicas en monopolios haciendo cometencia desleal a las demás. El catolicismo quizás no tiene vocación militar pero de ninguna manera pretende ser pacifista. El catolicismo cree en las virtudes de la religión católica asentadas en una nación y bajo el discurso de salvación pretenden excluir a las demás [religiones].

"Por eso es una preparación incesante para la guerra, la conquista, el sometimiento de otros pueblos. El fascismo es una expresión política y militar del imperialismo como alianza del capital financiero con el poderío militar."

Basta con oír los sermones del obispo sobre aplastar a los infieles. El Vaticano también utiliza la alianza del capital financiero con el poderío militar (fortalecimiento del ejército y compra de conciencias [en base a canonjías], pero mencionar a la herejía del ateísmo es un argumento muy pobre.

"La base social del fascismo es la clase media, y la base anímica de ésta es el "carácter autoritario". El fascismo hace que aflore en la clase media la vocación de orden, de disciplina, de pertenencia a un cuerpo orgánico que la dirija."

En ésto se basa principal y pobremente el libelista para desacreditar las acusaciones, sin embargo no interesa cuál sea la base social en la que se apoya el prelado, los resultados son muy similares. El caracter autoritario tampoco está ausente y también se observa el sentido de pertenencia en los sectores fieles al catolicismo.

"El liderazgo del Caudillo no se discute, se acata, y no hay lugar a la disidencia. Es como un atributo personal, un carisma, algo innato a su personalidad que se debe obedecer."

Cada día nos acercamos más a esto y aún así el autor no percibe las semejanzas.

El autor dice: "Me gustaría saber cuál de esos conceptos calza en el actual gobierno, que ha salido no de una sino de varias elecciones, que reconoce la libertad sindical, la libertad de pensamiento y de expresión, y sobre todo la disidencia. ¿Acaso la base social de este gobierno es la clase media? ¿Puede un Estado fascista reconocer 36 pueblos originarios con sus idiomas y sus culturas?"

Al respecto, recordemos que las reglas para las comuniones las ha ido cambiando el catolicismo [a través del tiempo], y disiento completamente respecto a la libertad de pensamiento, sólo reconoce a los creyentes leales, el resto son descalificados permanentemente con acusaciones de vínculos con los musulmanes o el ateísmo.

¿libertad de religión y de consciencia?... pregúntenles al Padre Espinal y al ex-católico Leonardo Boff sobre estos dos puntos. Vuelvo a repetir que no interesa que sea la clase media o cualquier otra si con esta obtiene apoyo mayoritario. Finalmente, recordemos que la iglesia prefirió reconocer 1 sólo pueblo elegido a tener que reconocer otros que le resultan bastante incómodos por la coyuntura actual.

Finalmente Ramoncito (sic) se pregunta "¿Puede haber un fascismo asentado en la base social de los pueblos indígenas, de los pobres, de las organizaciones sociales que cada día defienden sus reivindicaciones?"

Ni libre creencia, ni pobres, ni organizaciones sociales, ni reivindicaciones religiosas... es una pena que el libelista no pueda discernir el discurso de la realidad y no sepa diferenciar organizaciones sociales de proto-inquisidores. Las revelaciones y escandaletes pederastas a los que nos ha sometido el régimen han deslumbrado a propios y extraños que ahora son incapaces de ver las verdaderas semejanzas del fascismo con el "catolicismo".

Conclusion: la actual iglesia no es fascista, pero se parece en un 95% más por sus actos y sus discursos dentro de sus templos que por sus discursos en la Santa Sede. Es así que según el libelista, si el catolicismo se apoyara en la clase media y lograra su objetivo de modificar las comuniones a su gusto, sin duda podríamos llamar "El Duce" a nuestro Papa (pero solo en la tierra de los católicos.)

4 comments:

Pablo said...

Amen hermano!!!

Anonymous said...

Eres un gordo patetico jeje
PD. Ya te conoci
PD2 Con razón tu obseción con el javi
PD3 Oruro es una cagada

El Ciudadano said...

Es poco serio comparar una religión con una ideología/movimiento político.

Más parece una reacción intolerante de alguien que no tolera a la gente católica quizás o que generaliza la lógica errónea: Católico=Oligarca=Malo=Antimasista

"A Dios lo que es de Dios y al César lo que es del César"

Rebelde said...

Pablo,

Amén.



Anónimo,

Sin palabras.


El Ciudadano,

Me tendré que citar yo mismo: "... están las palabras del 'analista' ligeramente modificadas por Rebelde para recrear otro contexto, el del catolicismo. Y no, no estoy en contra del catolicismo, sólo utilizo ese ejemplo para demostrar lo peligroso de la manipulación y la ignorancia intencional que... "

Lo paradójico de tu analogía "errónea" (usando tu misma lógica) es que yo soy católico.